El incremento se replicará en todo el resto del país.
Luego del anuncio del aumento de transportes, el Gobierno confirmó que a partir del primero de agosto también aumentará nuevamente la tarifa de luz. La suba será de entre un 20% hasta un 28% para los usuarios residenciales, que representan un 24,4% en promedio.
El ministro de Energía Javier Iguacel detalló que el 35% de la población pagará $233 promedio por mes con el aumento incluido; el 37% abonará $643 y el 10%, mil pesos. “Quiere decir que casi todo el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) pagará menos de mil pesos por mes”, explicó el funcionario en conferencia de prensa.
De los más de 5 millones de hogares conectados a la red eléctrica en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano, casi un 40% (2 millones) son beneficiarios de la tarifa social, que aún se mantendrá. Esa asistencia permite que casi un 75% del consumo de esos clientes lo pague el Estado nacional.
El cuadro tarifario se divide en nueve categorías, según los niveles de consumo. Salvo los R1 y R2 (que demandan poca energía) y los beneficiarios de tarifa social, casi todo el resto deberá afrontar boletas de $ 1.000 mensuales o más.
Pero con el nuevo cuadro tarifario, aquella vivienda de poco consumo abonará $643 mensuales. Son los denominados «R2», que concentran un 23% de los clientes. Ese mismo usuario abona $ 268 si logra calificar como tarifa social.
Por su parte, los incrementos a Pymes y comercios irán entre 10% y 20%, dependiendo de la potencia instalada que vayan utilizando.
Si bien el aumento también correrá para el resto del país, aún cómo se trasladarán estos incrementos. El ministerio de Energía fija el mismo precio de costo de generación en todo el país, pero cada provincia después habilita a su distribuidora a diferentes márgenes.
